Para los que entrenan su oído musical aquí les dejo una nota curiosa sobre Mozart en su infancia:
A los catorce años Mozart era un afamado
genio que viajaba con su papá para dar conciertos por ciudades en Europa. A esa
edad fue cuando pasando por Roma, llegaron papá e hijo a la Basílica San Pedro
del Vaticano para escuchar un concierto que se ofrecía en la Capilla Sixtina;
ahí se interpretaba un el Miserere, obra de Allegri. Esa partitura era
cuidadosamente guardada y era castigo la prohibición de copiarla o reproducirla
fuera del Vaticano. Después del concierto, y ya en su casa, Mozart fue capaz de
transcribirla de memoria nota por nota sin equivocarse, así la partitura
dejó de ser secreta y Allegri alcanzó a ser reconocido para generaciones futuras gracias a Mozart.
No hay comentarios:
Publicar un comentario